Informe / DÍA MUNDIAL DE LA PESCA
Sin tiempo para la discordia
La celebración del Día Mundial de la Pesca en Lorient, Francia con una conferencia de dos días trajo esperanza y optimismo a la reforma de la gestión pesquera
El autor de este informe es Yann Yvergniaux (yann.yvegniaux@gmail.com), que trabaja actualmente en la oficina del CIAPA en Bélgica como asistente de proyecto en el Proyecto sobre pesca a pequeña escala y reforma de la PPC
El 20 y el 21 de noviembre de 2009 la organización no gubernamental francesa Collectif Pêche et Développement, (Colectivo Pesca y Desarrollo), con sede en Lorient, organizó en este famoso puerto bretón una serie de celebraciones con motivo del Día Mundial de la Pesca. Con el telón de fondo de la reforma actual de la Política Pesquera Común (PPC) de la Unión Europea (UE), la cooperación y las sinergias de que hace gala el sector dieron un toque optimista y esperanzador a los debates que animaron las dos jornadas de conferencias.
El Día Mundial de la Pesca empezó a conmemorarse el 21 de noviembre de 1997 cuando el Foro Mundial de Pescadores y Trabajadores de la Pesca se reunió en Nueva Delhi, India. Desde entonces se celebra anualmente con objeto de destacar la importancia social y económica de la pesca...
Informe / DÍA MUNDIAL DE LA PESCA
Sin tiempo para la discordia
La celebración del Día Mundial de la Pesca en Lorient, Francia con una conferencia de dos días trajo esperanza y optimismo a la reforma de la gestión pesquera
El autor de este informe es Yann Yvergniaux (yann.yvegniaux@gmail.com), que trabaja actualmente en la oficina del CIAPA en Bélgica como asistente de proyecto en el Proyecto sobre pesca a pequeña escala y reforma de la PPC
El 20 y el 21 de noviembre de 2009 la organización no gubernamental francesa Collectif Pêche et Développement, (Colectivo Pesca y Desarrollo), con sede en Lorient, organizó en este famoso puerto bretón una serie de celebraciones con motivo del Día Mundial de la Pesca. Con el telón de fondo de la reforma actual de la Política Pesquera Común (PPC) de la Unión Europea (UE), la cooperación y las sinergias de que hace gala el sector dieron un toque optimista y esperanzador a los debates que animaron las dos jornadas de conferencias.
El Día Mundial de la Pesca empezó a conmemorarse el 21 de noviembre de 1997 cuando el Foro Mundial de Pescadores y Trabajadores de la Pesca se reunió en Nueva Delhi, India. Desde entonces se celebra anualmente con objeto de destacar la importancia social y económica de la pesca artesanal en todo el mundo. La fecha festeja cada año la solidaridad entre las asociaciones de pescadores y aborda los desafíos que encara el sector.
El primer día fue consagrado a realizar una “crítica de la gestión pesquera científica” con una presentación de Menakhem Ben-Yami, antiguo pescador, ecologista y buen conocedor de las pesquerías israelíes. Ben-Yami destacó la insuficiencia del modelo bioeconómico, raramente cuestionado, cuando se aplica a la gestión pesquera. “Los administradores asesorados por los científicos rara vez ponen en duda las premisas fundamentales de la pesca”, afirma. En su opinión este tipo de ordenación pesquera se basa en datos científicos inadecuados y obsoletos que los pescadores no pueden disputar. La superioridad que se atribuye a las matemáticas y las ciencias exactas sobre cualquier otro tipo de conocimiento explica su persistencia.
En la opinión de este experto los modelos de gestión pesquera científica sufren dos lastres importantes: en primer lugar, consideran que la pesca constituye el único factor que produce la fluctuación de las poblaciones de peces y en segundo, se basa en modelos que tratan cada especie aisladamente en vez de estudiar las interacciones entre todas ellas. Para Ben-Yami, esto equivale a “un absurdo desde el punto de vista ecológico” que hace caso omiso de los enfoques ecosistémicos.
Ben-Yami, firme defensor del conocimiento y la sabiduría de los profesionales de la pesca, insiste en que es imprescindible considerar al pescador como experto en temas de gestión. De la misma manera critica la prevalencia de los datos científicos cuantitativos, que califica de “especulativos” o “inventados” y su manipulación. “Desde que se inventaron los ordenadores, muchos creen que unas meras estadísticas bastan para evaluar la situación de las poblaciones marinas. Es más cómodo que salir al mar a echar un vistazo por uno mismo”.
Conocimiento empírico
El debate posterior trajo a la luz los elementos esenciales para una colaboración eficaz entre pescadores y científicos. Benoît Guérin, secretario del Consejo Consultivo Regional para las aguas occidentales australes destacó la importancia de formalizar el conocimiento empírico de los profesionales de la pesca a fin de lograr su reconocimiento y plantear a los científicos las contradicciones en que caen. André le Berre, presidente del Comité Regional de Pesca de Bretaña (CRPMEM en sus siglas en francés) comentó que esta iniciativa exige en primer lugar hacer desaparecer la imagen de los pescadores como “saqueadores” y “embusteros”. René Pierre Chever, secretario del Comité Local de Pesca Marina de Guilvinec (CLPMEM) comentó la desconfianza mutua que existe entre pescadores y científicos. Todos se mostraron dispuestos a cooperar a favor de un sistema de gestión más cercano a la realidad del sector.
Se organizó una mesa redonda bajo el lema “los pescadores también son expertos”. Xoan López, secretario de la Federación Gallega de Cofradías fue el primero en intervenir insistiendo en la necesidad de reformar en profundidad la gestión pesquera y en tener en cuenta el saber hacer de los profesionales. Para Charles Braine, especialista de pesca del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), la colaboración entre científicos y pescadores debería tener como objetivo plantear alternativas a los sistemas basados en el total admisible de capturas (TAC) y las cuotas individuales transferibles (CIT), que los pescadores consideran como instrumentos poco adaptados para los recursos vivos. “Debemos seguir por esta línea, empezando por las bases, para establecer planes de gestión a largo plazo”, fue su conclusión.
Al final del primer día Alain le Sann, del Colectivo Pesca y Desarrollo, observó el recelo generalizado que los pescadores sienten hacia los científicos, un sentimiento que les ha llevado a “reflexionar seriamente” sobre el tema.
El tema del segundo día eran las “iniciativas pesqueras responsables desarrolladas por los pescadores a favor de una política pesquera común diferente”. Danièle le Sauce, presidenta de Pesca y Desarrollo comenzó la jornada de trabajo afirmando que “durante mucho tiempo los pescadores han delegado competencias. Durante mucho tiempo otros han tomado las decisiones en su nombre. La mejor manera de tomar sus iniciativas en consideración es cuando ellos mismos las valoran”.
Bastien Malgrange, encargado de investigación del colectivo, presentó una serie de “iniciativas pesqueras responsables” acometidas por los pescadores de la costa bretona. Entre las buenas prácticas mencionadas, individuales o colectivas, aparecen el manejo de la pesquería de vieira en la Bahía de Saint Brieuc y el establecimiento del Parque Marino de Iroise, así como el incremento de la selectividad de la pesquería de langosta en la bahía de Vizcaya.
Malgrange subrayó la importancia de las personas que son capaces de tomar iniciativas o de transmitir ideas innovadoras a la hora de implantar actividades responsables y sostenibles. Destacó asimismo la necesidad de que la toma de decisiones a escala local se oriente hacia el largo plazo, afirmando que “este tipo de evolución en la gestión pesquera es incompatible con las políticas que favorecen la globalización y la uniformidad”.
Con esta perspectiva en mente Romain Verger, pescador de línea de Ouessant, presentó su trabajo sobre la forma de añadir valor a los productos capturados con línea. Expresó su temor por el uso de CIT o de otros instrumentos que permiten la transferencia de los derechos de acceso y denuncia los márgenes de beneficio desorbitados de las cadenas de distribución. Abogó por adoptar tanto métodos cualitativos como cuantitativos y subrayó la insuficiencia de la PPC actual: “El régimen de subvenciones ha permitido alimentar artificialmente al sector pesquero, pero si lo pensamos dos veces, es evidente de que está abocado al fracaso”.
Katia Frangoudes, miembro de la red AKTEA e investigadora del Instituto Europeo de Estudios Marinos (IUEM) de Brest abordó el papel de la mujer en las comunidades pesqueras. En su opinión sigue sin estar suficientemente reconocido, y los propios pescadores son parte del problema. Efectivamente, las tareas realizadas por las cónyuges colaboradoras y su trabajo en la transformación y la venta quedan relegadas a menudo a un segundo plano. El problema del género raramente se menciona en los planes estratégicos y operativos de los Estados miembros, como tampoco ocurre en el Libro Verde de la Comisión Europea sobre la Reforma de la PPC. Hizo un llamamiento por un mayor reconocimiento de las asociaciones de mujeres pescadoras y una mayor participación en los procesos de toma de decisiones.
Elisabeth Tempier, de la oficina de Pesca y Desarrollo en el Mediterráneo, habló de las prud´homies (cofradías) y de buenas prácticas en esta zona. Las prud´homies, instituciones tradicionales de gestión, han pasado por una serie de altibajos en las últimas décadas que apuntan a un abandono de la lógica de reparto que caracterizó a los años sesenta. Se trata de un sistema territorial y democrático asentado en principios de respeto de las personas y de los recursos, que hoy en día se enfrenta a un sistema descontrolado y expansionista basado en la libertad individual de invertir e innovar.
Tempier exploró las opciones para el futuro: “El dilema al que nos enfrentamos y sobre el que deliberamos, planteado en el Libro Verde, consiste en saber qué modelo de desarrollo queremos elegir”. En su opinión existen tres posibilidades: integración de la pesca en el mercado global para mayor beneficio de las grandes empresas, bloqueo de los recursos de los que dependen muchas comunidades pesqueras por parte de grandes grupos ecologistas, o integración de la pesca en un plan de desarrollo regional. Según Tempier, la tercera posibilidad parece la que mejor podría reconciliar los objetivos socioeconómicos de las comunidades pesqueras con las exigencias de la sostenibilidad medioambiental (ver “El fiel de la balanza”, Informe SAMUDRA Nº 54, p.24).
Tempier destacó el interesante potencial de un modelo de integración regional para el Mediterráneo y el papel de las prud´homies en la explotación integrada de las áreas costeras con la participación de los pescadores, del sector turístico y los demás usuarios del litoral.
Gestión pesquera
Menakhem Ben-Yami intervino por segunda vez para explicar que la gestión pesquera se vuelve ineficaz si los pescadores la perciben como equivocada o falsa, “si se concibe como un enfoque de tipo “gran hermano” en vez de hacerse con la participación de los pescadores”.
Comparó dos sistemas de gestión: uno basado en resultados, otro basado en insumos. En su opinión, el primero, apoyado en las cuotas, propicia la concentración de recursos en las grandes compañías sin asegurar la protección del recurso, mientras que el segundo deja a la pesca artesanal cierto margen de maniobra.
Ben-Yami citó el trabajo de Elinor Ostrom, premio Nobel de economía en 2009, explicando que “numerosas pesquerías costeras han sido manejadas adecuadamente por comunidades locales que controlan el acceso, los derechos de pesca, los métodos de pesca, etc. Con frecuencia la gestión es mejor que si la llevara a cabo el Estado o un sistema privado”.
Los debates que siguieron a esta intervención brindaron una oportunidad para insistir en la necesidad de una gestión pesquera descentralizada. Alain Cadec, eurodiputado y vicepresidente de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo alegó que la territorialización desempeña un papel fundamental en las políticas de la UE, en lo relativo a las particularidades de cada región. Xoán López opina que una gestión diferenciada para cada grupo local constituye un requisito fundamental para diseñar la pesca del futuro y permitir la aplicación de medidas de gestión adecuadas para el 2020.
La presidenta Danièle le Sauce cerró las celebraciones del Día Mundial de la Pesca con una nota positiva, alegando que el diálogo entablado gracias el proceso de reforma de la PPC había permitido a los profesionales de los sectores artesanal e industrial deliberar sobre los entresijos de la gestión pesquera “No hay tiempo para la discordia”, fue su conclusión.
Más información
eussf.icsf.net/
Página web del CIAPA sobre pesca a pequeña escala y reforma de la PPC de la UE
www.peche-dev.org
Colectivo Pesca y Desarrollo